15 de agosto de 2013

Espejos

Dicen que los ojos son el espejo del alma, y que los espejos son las puertas a otros mundos. Mundos en los que al fijarse los tuyos en los míos un océano abrasador de lava turquesa me salpica y me absorbe, empapando cada poro de mi piel, arrastrándome en un torbellino de emociones que me recorre ardiente las entrañas. Abre mi pecho y conecta en otra dimensión cual agujero de gusano. Permite que me veas cual soy: sin artificios, capas, pieles y muros que construyo para proteger mi sistema inmunológico de posibles agresiones externas. Invasiones como la tuya, aunque sea yo misma quien devaste todos los diques que probablemente en el futuro me ahoguen. Pero en este instante, en otra realidad, has destruido la barrera temporal y conseguido que atesore cada latido de esa mirada como si fuese el último, ya que aquellos momentos que en su totalidad no llegaban a un minuto, bien valdrían una vida entera.

No hay comentarios:

Publicar un comentario